Redes sociales virtuales que nominan de forma automática

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Sergio Suárez (EL BLOC DE NOTAS)

Las redes sociales de Internet, Facebook, Twitter, sobre todo, las forman millones de personas que crean un universo virtual de amistades y contactos. Tener 10 amigos es menos popular, que tener 200, pero estar asociado a dos centenares de personas también es un problema.

Un problema porque muchos de esos enlaces, ya lo dice la experiencia y los comentarios de cientos de internautas; no deberían estar ahí. El comportamiento de algunos 'amigos', sus comentarios, su falta de afinidad, resuelve a muchos a valorar la posibilidad de eliminar el vínculo que les une, a echarlos de su lado, si lo prefieren en un lenguaje más claro.

Pero eliminar a alguien, con el que, tal vez, hemos compartido comentarios, es una cuestión que nos puede plantear duelos morales, o, en cualquier caso, algún sentimiento de culpa.

Para evitar todos estos males derivados, se puede evaluar una idea que puede ser, en cierta forma revolucionaria en el planteamiento actual de este tipo de redes sociales, y es mantener un número límite de amigos vinculados a nuestro perfil, amigos que hayamos aceptado en un momento dado. Tal vez 50, o tal vez menos, solamente 25.

Pero, algo más. Si esas personas vinculadas como amigos no interactúan de una forma clara con nosotros, o no lo hacen de la manera más adecuada, un sistema convenientemente programado las expulsaría de nuestro lado virtual con un comentario añadido sobre la explicación de su conducta.

Se trata de una idea de negocio para una empresa de desarrollo de software o para una firma que cree un soporte, una red social, que contenga ese perfil en su programa base.

¿Qué puede ser motivo de expulsión? Pues algún tipo de acoso, la utilización del chat como medio de enviar un mensaje sin que la otra persona haya aceptado la comunicación, el uso de un excesivo número de mensajes a una misma dirección de correo, no abrir los emails enviados por otra persona en un tiempo limitado, o, en su caso, no contestarlos.

Todo un mundo de posibilidades y de negocio para mantener la privacidad de las redes sociales, su uso correcto y una garantía para salvaguardar nuestro derecho a la comodidad de estar donde queremos estar.